sábado, 17 de octubre de 2009

MÍRAME GOZAR

Cuadro: Julio Romero de Torres. Carmen de Córdoba.

Construyen tus caricias contornos de mi piel,
mis labios nacen de tus besos en mi rostro,
tienen mis senos el tamaño de tus manos.

Tu sexo construye el hueco que lo acoge,
mi cuerpo tiene fronteras de tu boca,
tus ojos son centinelas del placer.

Mírame gozar, porque ninguno como tú
tolera mi femenino Goce, y en él se crece
y de él se alimenta, y se perfuma la piel con sus aromas.

Dime esa palabra que retuerce mis tímpanos,
que deshace mi alma como hielo sobre fuego,
que hace nacer ríos entre mis piernas.

Otra vez la lujuria sin pecado atravesó los huesos,
puso ayes en las bocas,
y dibujó sonrisas iridiscentes en ignotas pupilas.

Otra vez el mundo era la cama,
y todas las guerras del planeta eran esta guerra,
esta batalla que libramos.

Otra vez nos rompimos la garganta
de gritar nuestro amor por las esquinas,
y no ha ganado nadie, y los dos hemos vencido.

Cada uno ha conquistado su pedazo de goce,
cada uno ha vivido su momento de gloria,
pero no hay nada construido,
así es el pequeño goce del sexo:
un instante y todos los olvidos

Alejandra Menassa.

4 comentarios:

Leni dijo...

Soberbio Alejandra.
Un poema de pasión viva...

No podria elegir un verso ,cuando el poema lo es todo.
El mundo y la cama.

Valiente.
Eres valiente y sé que incluso
te quedas corta
(porque quieres)


Un gozo..
que digo un beso...........

Alejandra Menassa dijo...

Gracias Leni, me pasaré por tu blog. Ya sé que es un tópico decir que no se tiene tiempo, el tiempo no se puede tener, se hace, pero lo que si es cierto es que cada vez estoy más ocupada en mi trabajo, y eso me distancia un poco de los blogs. Agradezco tu visita.
UN abrazo

Francisco Javier dijo...

Me encanta ese cuadro, es hermoso y expresivo, sobre todo las mujeres que retrataba Julio Romero de torres, eran muy distintas a otras, típica cordobesa, castellana, de la época, un texto imaginativo y hermoso, un abrazo Alejandra.

Alejandra Menassa dijo...

Gracias Francisco.
Un abrazo